Me han pedido que comente algo sobre el curso de este pasado fin de semana.
Esto me recuerda algo que comentamos algunas veces con mi mujer cuando vamos a comer de restaurante. Cuando vas a comer a un restaurante "bueno", y por bueno tampoco quiero decir de lujo o excesivamente caro, sino un sitio donde se come bien, el servicio es bueno, en fin, todo está como tiene que estar. Es en esos casos cuando suele acercarse el camarero a mitad del primer o segundo o plato y te pregunta, ¿qué tal? ¿está todo bien?.
Porque sabe perfectamente que todo está excelente.
O acaso os han venido a preguntar cuando habéis tenido la mala suerte de ir a comer a un restaurante malo. ¿Verdad que no?
Pues esto es lo mismo. Me piden que comente algo que ya saben positivamente que es excelente. ¿Qué puedo decir sobre el curso? Pues poco más que eso. Solo acudí el Sábado al apartado de Niten Ichi Ryu que es lo que realmente me interesaba.
Disfruté mucho con una escuela que hacía mucho tiempo que quería conocer y no había tenido la oportunidad.
Nicolás me pareció una persona estupenda, muy cercano, afable, cordial, super dispuesto a ayudar e informar, en fin un excelente instructor. Nadie diría que era el maestro sino un compañero más, y en eso radica la grandeza de un buen instructor.
De su técnica que voy a decir: precisa, elegante, contundente, puro budo.
Con su permiso os explico un poco lo que practicamos y algún pequeño apunte sobre la escuela que él mismo nos pasó.
Fueron cuatro horas y media de entreno continuado con apenas un descanso de cinco minutos y otro de unos diez minutos.
El curso quería ser un vistazo general a la parte Nito (dos espadas) de la escuela, es decir a lo que más la caracteriza, a la parte que Miyamoto Musashi creó de la nada, la utilización del ken y el kodachi conjuntamente, cada uno en una mano.
Empezamos practicando los 5 kamaes típicos de la escuela: Seigan, Jodan, Chudan, Hidari Waki Gamae y Migi Waki Gamae y la forma característica de golpear con el bokken y el kodachi.
Luego pasamos ya a practicar cada una de las 5 katas de que consta el apartado Nito de la escuela, tanto en solitario como por parejas, dependiendo de la dificultad de cada movimiento.
Mis muñecas y antebrazos dan fe del entreno cañero aunque gracias a Dios a mitad del seminario un alma generosa me prestó las armas de la escuela, muchísimo más ligeras que mi bokken y kodachi. Fue como pasar de una Vespa 125 a una Kawasaki 500.
El único punto negativo del curso fue la poca asistencia de participantes, lo cual es muy de lamentar puesto que la calidad del curso merecía muchísimo más.
Sólo diez participantes es un balance muy pobre. ¿La crisis? ¿El día horrible con lluvia torrencial que hacía en la Ciudad Condal? ¿La festividad de Todos los Santos?. No se. En fin, dicen que no hay mal que por bien no venga y esa poca asistencia hizo que disfrutáramos de todo un pabellón para nosotros diez con lo cual teníamos espacio de sobras para practicar sin problemas.
Aunque eso no creo que consuele al organizador del seminario.
En cualquier caso buen rollo y buen entreno. Seguro que el Domingo fue de la misma manera.
Para los que no conozcan la escuela, brevemente comentar que Niten Ichi Ryu es la escuela de kenjutsu creada por el legendario Miyamoto Musashi. Consta de tres fases que van en relación con el nivel de aprendizaje. Primero se empieza con Itto no Kata (usando el bokken), luego viene Nito no kata (bokken y kodachi a la vez) y por último Kodachi no kata (sólo kodachi).
Itto no kata son 12 técnicas que Miyamoto Musahi aprendió de su padre Munisai y de un monje llamado Takuan y que más tarde él perfeccionó. Kodachi no kata son 7 técnicas que tienen relación con las anteriores y Nito no Kata consta de 5 técnicas.
Esta es la parte más característica y original de la escuela ya que es 100% suya y la única que menciona en su famoso libro Go Rin no Sho (El libro de los cinco anillos), no tan solo como una serie de técnicas sino como una filosofía, un camino de vida.
Esperemos que Nico vuelva el año próximo y podamos seguir disfrutando de esta magnífica escuela y que tenga muchos más participantes en el seminario.
Saludos,
Dani Esteban -Kôryu-
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