Crónica del seminario Bujinkan Matsuri de Monforte de Lemos

Nos envía la crónica del curso nuestro buyu José Antonio Camino:

 

Comenzó la mañana del sábado, nublada, lo que en un principio hacía presagiar que sería necesario acudir al polideportivo, con lo que se “nublaría” la belleza del paraje natural y el entrenamiento no sería lo mismo. Pero es que lo mejor estaba por llegar, a eso de las 10:30 horas, el sol comenzaba a hacer acto de presencia y con él, las personas que han hecho posible que este seminario fuese lo que fue: UN ÉXITO.

Comenzaron a llegar los buyu de Salamanca, Elche, Barcelona, Coruña, Lugo, Monforte e incluso nuestro Buyu desde Cádiz, vamos, que más lejos imposible. Lo mismo me olvido de alguien o puede que esos de los que me olvido, simplemente, nadie se acordó de ellos, pues al final su asistencia fue tan innecesaria como innecesario fue todo lo que montaron para al final no estar allí. Pero dejando eso a un lado, el sol, ese astro que brilla con luz propia, como todos los que allí estábamos, ya empezaba a hacerse un poquillo pesado, por qué no decirlo.

Finalmente comienza el seminario, en el que el maestro Conde, nos deleitó durante las dos primeras horas de la mañana. Fue un trabajo espectacular, en su línea, empleando un Taijutsu envidiable y haciendo las delicias de los allí presentes, como anticipo de lo que estaba por llegar.

Ya después de una comida, que aunque un poco “justita”, pues todo hay que decirlo, pero sí satisfactoria por las ganas que en todos había de comer, comenzó la clase del maestro Aixa, perteneciente a la escuela Takagi Yoshin Ryu. Espectacular también. Debo decir que era la primera vez que veía trabajar en un seminario a este maestro y la verdad, no me defraudó lo más mínimo.

 

Por fin, tras un duro día, más bien por el sol que por otra cosa, pues entrenar nos gusta a todos los que estábamos allí, pero entrenar bajo ese sol de justicia, la verdad que fue duro el entrenamiento, pero con todo y eso, la sonrisa no faltó en los rostros de los presentes.
Así de este modo, llegamos a un entrenamiento nocturno, como nunca antes lo había visto. El maestro Ubaldo, hizo que sus dos horas, a todos se nos pasaran volando, casi ni cuenta nos dimos, y eso que no veíamos ni el reloj. Bromas aparte, demostró a los allí presentes que un entrenamiento en esas condiciones de luz no se parece en nada a un entrenamiento bajo un sol abrasador. Hizo un inicio de Koto Ryu, con unas condiciones de luz escasas, del cual todos, incluido yo, quedamos abrumados.

Pues ya por último, terminó el Seminario con el maestro Serrano. Qué decir de Serrano que no se sepa ya, estuvo a la altura de las expectativas, no me extraña, lo dejé para el final. Estaba que se mordía las uñas y eso se pudo notar en la ejecución de cada una de las técnicas mostradas, excelente trabajo con Shishin bo y con Nawa, y por qué no decirlo, manguera jutsu.

No quiero terminar esta ligera crónica, sin agradecerle a todas las personas, que han hecho un enorme esfuerzo por estar aquí, que han viajado desde enormes distancias, para con su aportación, conseguir los fines propuestos, que no son otros que el poder colaborar con nuestro Sensei Masaaki Hatsumi, primero en la construcción de un nuevo Hombu y segundo, en mostrarle cómo es posible entrenar personas de diferentes partes de la geografía nacional si la causa es noble.

A todos los que allí estuvieron, GRACIAS, y como dijo un amigo, para los demás, MASTERCARD.

Un abrazo a todos.

José Antonio Camino