¿Maestro? ¿Quién?
Artículo de Doug Wilson, extraído de su blog Henka
Publicado en Noviembre 2008.
Me he permitido retocar algunas pequeñas cosas de la traducción al castellano (Dani Esteban -Kôryu-)
Nos estamos acercando al Daikomyosai aquí en Japón y hay varios pensamientos que corren por mi cabeza en cuanto al entrenamiento de este año y al estado de la Bujinkan. El Sôke me ha inspirado mucho durante este año y he tratado de poner muchas de estas cosas en práctica y usarlas en la vida cotidiana.
Antes de nada, tal como he dicho muchas veces antes, este arte marcial que estamos estudiando o en este caso tal vez es mejor llamarlo "estrategia de vida" es un proceso de toda la vida que nunca puede ser completamente dominado. Esto se pasa por alto muchas veces y más aún cuando nos autoetiquetamos maestros. ¿Maestros de qué? ¿De este arte marcial? Bueno, ¿y cómo puede ser esto posible cuando nunca se puede lograr una maestría de este arte? El Sôke es el primero en admitir esto y ésta es la esencia del Bufu Ikkan. Y a pesar de eso usamos demasiado libremente el título de maestro.
¿Qué hemos dominado? Bueno, para ser directo diría que únicamente el “ego”. Generalmente hablando, ¿cuántos de nosotros podemos ejecutar realmente lo que hemos aprendido en el dojo? (Y no estoy hablando necesariamente de la parte técnica). ¿Cuántos de los que afirman ser maestros consumados (en la Bujinkan o fuera de ella) realmente tienen la experiencia vivencial real o la experiencia con los incidentes tan profundamente arraigada de tal manera que puedan ser verdaderamente consistentes en sus acciones y reacciones? Aparte de una pequeña élite de la Bujinkan quienes tienen experiencia con conflictos a diario, ¿qué estamos haciendo el resto de nosotros para utilizar las enseñanzas de Sôke en nuestras vidas? ¿qué diferencia hemos tenido en la vida respecto a otros, cuál es el impacto positivo de nuestro entrenamiento?
Analizando la historia de los “maestros” en las artes marciales ¿qué es lo que todos tienen en común?¿Es habilidad?¿Es conocimiento? ¿Es poder? Yo más bien tiendo a pensar que es la experiencia de entrenar toda la vida y simplemente eso.
Además, habilidad, talento, conocimiento, fortaleza, todas estas cosas no significan nada si no puedes ejecutar, llevarlo a cabo. Lo que estamos aprendiendo aquí es una estrategia de vida y la defensa personal y las técnicas de supervivencia son las bases de esto, pero en el mundo de hoy donde solo unos pocos nos enfrentaremos de cara al peligro, ¿qué es lo que estamos haciendo para mejorar nuestras vidas y las vidas de la gente que nos rodea? Este es el espacio superior. ¿Estamos controlando esto para el bien común o para nuestro propio bien y ganancia? Hago estas preguntas porque yo me pregunto lo mismo a diario. Tratando de mantener los pies en la tierra, de ser auténtico.
Creo que hay un dicho que dice: “el único error es aquel que se comete dos veces”. Después de haber entrenado en este arte por más de 25 años continuo cometiendo los mismos errores. Finalmente me he dado cuenta que esto es natural y que aprendemos a través del Budo que los errores no se pueden evitar y que lo que PODEMOS controlar (eventualmente) es el como elegimos reaccionar.
El Ninpo y la Bujinkan son una estrategia de vida y no una técnica física todopoderosa como piensan algunos. No estamos estudiando un simple método de combate físico. Un verdadero guerrero no elige entrar en combate o en una situación que en la que implique arriesgar la vida. La meta es evitar esto a toda costa y solo si es tu trabajo o tu deber y tienes que actuar, en cualquier otro caso no debemos intentar atraer la violencia. Los verdaderos guerreros o Bugeisha luchan por la verdad, la justicia, el honor y la autoprotección, solo enfrentándose a un nivel físico como último recurso. No es el guerrero el que elige enfrentar una situación físicamente para satisfacer el ego llevado por la ganancia material como el dinero, la fama o el exhibicionismo. Aquellos que deciden pelear para obtener la ganancia material no son artistas marciales y no son Bugeisha. El Bugeisha no sigue el ego, el Bugeisha sigue la paz. El espacio de paz existe en varios planos - San Shin o Shingitai.
¿Maestros? Seamos auténticos. Como muchos de los lectores de este blog, o aquellos con los que he tenido el honor de entrenar en el dojo, conocen que a mi me gusta decir “seamos auténticos”. Este ha sido mi lema durante el último año basado en poner en práctica lo que el Sôke ha inspirado así como mi compromiso personal a ser honesto conmigo mismo y con mis compañeros acerca de lo que estamos haciendo aquí.
Seamos auténticos entonces a un nivel físico, ¿cuántos de nosotros estamos enfocados al 100% cuando entrenamos? ¿Cuántos de nosotros nos damos cuenta de si el ataque de nuestro compañero de entrenamiento es real? ¿cuántos de nosotros somos honestos con nosotros mismos acerca de nuestras propias habilidades?
En el futuro, cuando nuestro Sôke ya no esté disponible para entrenar ¿que pasará? ¿habrá un mundo lleno de maestros?
¿Maestros de qué?
Bufu Ikkan
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